El ambiente relajado y cercano de Campezo ha animado a las personas mayores a interrumpir por un día su rutina habitual y pararse en nuestro espacio de calle para prestarle atención a la seguridad vial.
El remate de la jornada se realizó en el hogar de las personas jubiladas donde se pudo disfrutar de una sesión participativa con el colofón final del monologo de Sergio Arróspide.